a space for spontaneous expression and interdisciplinary improvisation
no schedule, no explanation, just interaction, re-interpretation, uncertainty is welcome
Imagen de CUE

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[Joris (Rotterdam)]

Decoracion A short story about CUE Rotterdam losing virginity

A short story about CUE Rotterdam losing virginity.

We first cleaned the basement which was full of shit from the sewer. Ola, ben and me started decorating the space with, well, let's say trash which we found somewhere there.

We created a ministage with drums on it, put some instruments around it and managed to get an amp, some mixers and beamers.

So we sat there three of us, not knowing what to expect, coming down from all stress to prepare after a busy week.

I don't know how and where they came from, but at about 10 the space was filled with people i never saw before.

We started playing some music, played with a camera that was made sensitive to light, on the screen appeared time portals and other amazing visuals. Interaction slowly emerged. There were some singers and guitar players.. islands were slowly growing into a peninsula.

Then the place started to get full, people were dancing and playing, putting paint on the wall and on each other faces, there were small rolls of receipt paper all around so people started rolling themselves in there. The list of purchases growing without buying anyting. Ola started making a mess out of purifoam (stuff that is very bad for the environment) and so it appeared to be snowing in CUE.

The vibe was constantly growing with 4 professional drummers who played jazz, samba, and gave rise to an almost never ending climax. For sure we were on a continent now and this new discovered place revealed a promise of becoming neverending.

Alas, we had an anticlimax when neighbours started to complain. About 2.30 the police came and then i was responsible for keeping people away from sleep.

The first amazing thing was the interaction between people during the CUE. The second amazing thing was the playfulness of the people that came and just started.. some chaotic, some very professional. The third amazing thing is that people need this feeling of coming together and that there's not a lot of spaces where they can do whatever they feel like as in CUE.

In short, it was great!

[Ricardo (Madrid)]

Decoracion CUE Madrid deja atrás Intermediae (untranslated)

CUE Madrid inauguró el año 2009 con su edición de enero fuera de Matadero-Madrid. Si bien durante 2008 se fue celebrando en las instalaciones de Intermediae, durante 2009 CUE Madrid deja atrás el lugar que lo acogió en sus inicios.

CUE Madrid ha contado durante 2008 con una de las Ayudas a la Creación Contemporánea del Ayuntamiento de Madrid, traducido en una aportación económica y en el apoyo institucional de Intermediae, que nos ha cedido su espacio y sus recursos para realizar CUE Madrid una vez al mes. Esto ha significado un magnífico espacio (las naves de Intermediae en Matadero-Madrid), proyectores, ordenadores, estructuras para colgar pantallas y atrezo, mesas y tarimas, materiales de diferentes tipos y un montón de otros recursos que trataban de singularizar cada edición de CUE (por no mencionar cosas como la difusión o el soporte técnico).

Durante 2009 aún no sabemos si CUE podrá continuar en Matadero-Madrid. Es posible, incluso probable, que después de marzo CUE no se vuelva a celebrar en Intermediae, al menos con una edición mensual como ha venido siendo hasta ahora. Por ello CUE Madrid afronta el año 2009 con la vista puesta en el cambio de lugar; no sabemos si a otro lugar fijo u optaremos por la itinerancia como sucede en Berlín o Barcelona.

En cualquier caso quizá haya quien diga: «El espacio del Matadero es inmejorable, CUE no volverá a ser lo mismo, perderá calidad». Esos mismos quizá piensen que la preparación del espacio, la diferenciación de cada edición y la capacidad de la organización para montar un buen «tablero de juegos» es esencial para el buen funcionamiento de CUE. Sin embargo esto dista mucho de ser cierto, y significa una error en la apreciación de CUE.

La preparación del espacio no deja de ser algo accesorio, algo de lo que CUE podría prescindir. A todos nos gustan los «juguetes», cuanto más divertidos y sorporendentes mejor. Pero no por ello hay que caer en la idea de que si no tenemos ese juguete maravilloso no vamos a poder divertirnos. El juguete nos gusta, pero no dependemos y no debemos depender de él. Los niños, aunque a veces traten de convencernos de lo contrario, no necesitan grandes juguetes. Ellos simplemente hacen 'clic' y comienzan a jugar con lo que haya: cualquier objeto o situación puede ser el juego más divertido.

CUE no pretende, por tanto, abrir un espacio con juegos preparados y predeterminados para que la gente sepa a qué y cómo jugar. En ese caso hablaríamos con el Parque de Atracciones de Madrid o con alguna entidad similar para tratar de modernizar sus propuestas. No queremos, pues, que la gente venga a CUE sabiendo perfectamente qué habrá y qué hacer. No en vano siempre hemos dicho que la incertidumbre es bienvenida. Es por ello que CUE presenta un espacio de libertad y espontaneidad dónde el juicio estético no es relevante para CUE. Un lugar dónde no deberías saber que es lo que a suceder, un lugar dónde no impere esa idea de que cada lugar y situación tiene unas normas de conducta establecidas y no escritas que compartimentan los diferentes momentos de la vida cotidiana. Es por ello que el cambio de lugar no es sino una ayuda para que CUE no se apolille asentado siempre en el mismo lugar, de la misma forma, del mismo modo.

Así, que CUE abandone Matadero-Madrid no debe ser más que la apertura de una nueva etapa de nuevas situaciones y posibilidades que desconocemos. Nos ayudará a mostrar que CUE puede hacerse en cualquier parte y contexto, que no necesita de una gran infraestructura y que es más un estado del espíritu que una fiesta restringida a un tiempo y a un lugar. Mostrará que si bien Matadero-Madrid es un gran lugar para realizar CUE Madrid, también lo serán cualesquiera otros espacios que encontremos, y no que no tendrán por que limitarse a lugares «preparados» u orientados a «lo artístico», ni siquiera a un tiempo concreto. CUE podría hacerse igualmente en una sala «acondicionada» como en uno los andenes del Metro; lo mismo en la calle que en un patio interior. Por que CUE no depende ni vive en un tiempo ni en un lugar concretos; no se debe confundir CUE con la propia celebración de CUE.

[Jorge (Madrid)]

Decoracion CUE y la flexibilidad (untranslated)

Quien disfruta de CUE, no puede ser ni artista ni espectador. El espectador debe quedar inmediatamente abrumado por el caos y por la falta de seriedad —cabría decir, por la falta de obra—; y el artista no conseguirá ser el centro de atención tanto como le gustaría —pues CUE está lleno de centros—. CUE quiere tratar a todos los asistentes por igual. En CUE, el artista consagrado como tal (que a sí mismo se llama artista, porque se dedica normalmente a producir ciertas obras o a realizar ciertas acciones, y además domina ciertas técnicas) no es más ni mejor artista que el jefe de obra o el panadero que entra aquí y pasa un rato pintando o bailando o chillando porque le apetece. En verdad —no nos confundamos—, quizá unos sean artistas y otros no; lo que quiero decir es que CUE está hecho para unos y otros por igual. Esto puede irritar a quien llegue a CUE con el ánimo de ser el artista —como quien dice el protagonista— de la noche; y debe irritar al espectador que pretende encontrar una obra técnicamente impecable. CUE no elabora juicios sobre el resultado; a CUE todo le gusta.

Mal está, entonces, considerar que CUE es un espacio para artistas. Por ejemplo, en una edición reciente, una bailarina insinuó que había demasiados fotógrafos y videógrafos en el espacio, y que intimidaban demasiado y “cortaban el rollo”. En estos casos, la reacción inmediata del artista es acudir a los organizadores de CUE para que hablen con los reporteros y se corten un poco. Esto, sin embargo, sería actuar en contra de CUE. CUE no puede favorecer a los bailarines y desfavorecer a los reporteros, porque CUE no tiene por qué ser un espacio para bailarines ni para artistas de cualquier clase…, quizá sea un espacio para reporteros, o para cocineros, o para locos… O sea, CUE debe ser para todos, y esa es su gracia. Al final, lo que queda es la pura interacción (acomodarse e irritarse sin cesar, buscar la mirada del otro y dar la espalda a los demás). Aquí cada cual debe lidiar con lo que le gusta y lo que le disgusta. El objetivo —nada más simple— es pasar un buen rato de ingravidez. No se trata de crear nada, sino de gozar todo lo posible del tiempo que se nos ha dado.

Ahora bien, quien piense que se trata de un espacio en el que uno puede hacer rotundamente lo que quiera, desde luego tendrá también problemas para adaptarse. CUE es un espacio real; aquí no dejan de operar las determinaciones propias de cualquier espacio. Por lo general, se trata de una sala prestada, que como tal servirá para otras cosas aparte de para alojar CUE. La sala tendrá unas condiciones que habrá que respetar, y unos equipos que habrá que mantener Uno, por ejemplo, no puede ir al actual CUE de Madrid (alojado en las instalaciones del Matadero) y ponerse a tirar muros, y ni siquiera puede pintar las paredes o los muebles que hay allí: esto es algo normal, una exigencia de los dueños de la sala. CUE podría hacerse en mi casa, y en ese caso tampoco me gustaría que pintaran o rompieran mis paredes y mis muebles. Desde luego, CUE puede hacerse en un solar abandonado o en una ruina, tal que uno puede arremeter contra todo lo que hay ahí —eso sería estupendo—, pero aún así seguiría sin valer hacer daño a otros o cosas así… Siempre habrá un límite más o menos arbitrario, pero esto no es ni mejor ni peor; esto es lo normal, lo real. Porque CUE no consiste en un espacio carente de reglas —eso sería una utopía estúpida—; CUE nos invita a sobreponernos a las reglas (teniendo en cuenta que las reglas más profundas nos las imponemos nosotros mismos); CUE nos invita a disfrutar dentro del enorme marco de posibilidades que nos brinda. Uno ha de venir a CUE con el único ánimo de divertirse, y lo mejor es no haber pensado en qué consistirá su diversión (pues podría encontrarse con la sorpresa de no poder hacer lo que quiere, por la razón que fuere). Otro caso real: un individuo llega con la intención de arrojar unos huevos rellenos de pintura. La organización de CUE Madrid le dice al individuo —que se hace llamar “artista”— que los arroje sobre un plástico si quiere, pero que no manche los muebles de madera —por simples y corrientes exigencias de quienes ceden el espacio—. Entonces el artista arremete contra la organización y concluye que CUE es una gran mentira, que él no puede expresarse libremente, porque lo que quiere es arrojar sus huevos al aire. ¿Qué podría decir CUE? CUE diría: “Has venido demasiado predispuesto a lanzar tus huevos. Deberías sobreponerte a las circunstancias y tratar de disfrutar de tu tiempo haciendo otra cosa, abriéndote a las condiciones que presta el espacio, improvisando aquí y ahora el modo de divertirte”. Puede insistir el artista en que lo que él quiere es tirar sus huevos y que prefiere irse —así, de malas formas—, pero eso es ni más ni menos lo que debía pasar. CUE no pretende ser un espacio al que acudir a hacer lo que más te gusta, sino quizá todo lo contrario: CUE nos propone el reto de acomodarnos a unas inestables e imprevisibles circunstancias, en las que habrá cosas que nos gusten y cosas que no —porque así es la vida—. Si CUE se hiciera en una ruina, el individuo podría haber arrojado sus huevos. En el CUE de Madrid no podía hacerlo, y esa determinación fue más fuerte que él (por eso se marchó enojado). CUE es flexibilidad. El que no es flexible, lo más probable es que no tarde en marcharse; eso es lo normal, no es ningún problema.

Puedo recordar —como modelo a seguir en CUE— los juegos que todo hemos hecho siendo niños. Salías al parque y te ponías a jugar a lo que fuera con otros niños a los que no conocías. Cada cual hacía lo que le parecía oportuno y, sin duda, yo lograba divertirme. Había momentos en los que uno entraba en disputas con otro, y entonces surgía el “eso no se vale”. Así el juego empezaba a tener reglas, pero no por eso dejábamos de divertirnos. Todo lo contrario, ahora nos gustaba lidiar con esa regla, caminar sobre su límite sin atravesarlo. Los niños son infinitamente flexibles cuando tienen ganas de jugar. Pues no se trata de jugar a eso o a aquello; se trata de jugar a lo que sea, con lo que aquí tengo encima y con la gente que ahora me rodea.

Por eso el artista —de profesión artista— que llega a CUE, no debe venir en condición de artista, sino más bien en condición de niño; y lo mismo vale decir del espectador, o del reportero, o del cocinero…, incluso del organizador de CUE. No todos los que entrar en CUE consiguen zafarse del rol con el que entraron —esto es un hecho—, pero sé de muchos que sí lo han hecho y que lo hacen cada vez: éstos han de ser los únicos que queden realmente complacidos —o así es, al menos, como me lo han hecho saber.

¿Eres capaz de sobreponerte a tus propias exigencias, a tus propio gustos, a tus criterios y convenciones? Esto es lo que se pretende en CUE. Por supuesto, no es necesario que existan espacios CUE para conseguir esto. Lo que sucede en los espacios CUE puede suceder también fuera de esos espacio. Toda nuestra vida podría —quizá debería— ser un CUE gigantesco y constante. Quizá ya lo sea a nuestras espaldas, sin que nos demos cuenta. Si los espacio CUE sirven para algo, deben servir para que nos demos cuenta. CUE no es nada más que una señal.

[Diegonante]

Decoracion CUE or the necessity of a risky gesture

CUE has originated for a lot of different reasons, but one of them, without any doubt, was this: to react against the moulding, stiffening, mainstreaming and lack of spontaneity that is to be found in most of contemporary artistic events. Or, if we dare to take a step further, to react against the overwhelming repression, disciplining and censorship on every aspect of our life, that is against the attempt of leading our conduct.

As for me, there are too many things that are just unnecessary, that I would prefer not to be there, because everything would be better without them, and what I feel is that wherever I go I always find this sort of things that I don’t like, because they are not at all related with art, they have just been added there, where you see these faces who pretend to be respected because they are holding a tuba, behaving as if you were a pseud, playing music in the pureta club of your pureta friends, hoping moreover that my behaviour will be considered respectful enough.

This is why I believe that what CUE needs more is spontaneity, actions that are direct and born out of necessity, instead of “putting art on a pedestal”. CUE does not care if you play well your clarinet, if you are good in writing music, or if you are a master of dance: CUE cares about a gesture that is able to stand by itself, with no regard to its artistic value, just because it’s free, because nobody has told you what to do, nor how to behave, nor when you should do this and that, because you give yourself your own limits, that is the importance of autonomy. At last, and this is why in my opinion art for CUE is just an excuse, what CUE is about should be nothing more than making us think: “why do we behave as we behave moment by moment?”

And what I’m more glad about is that the comment I end up hearing most often about CUE is usually: “Here I feel good, things are just good”. In the end, this the only aim of CUE: that people who go there feel good in it, all the rest is about each one’s responsibility.

[Diegonante]

Decoracion A place where to spend a good time

Some weeks ago in a cultural supplement Angel Gonzalez Garcia wrote:

“Art has transformed into a colossal farce. A farce to which we should not be contributing anymore. Maybe we should hold a sort of strike against museums of contemporary art, or rather against museums in general. In the end, why not? They have nothing to do with art, but just with the industry of images. It’s a real pity that art, which was conceived to make the presence of men on the earth more pleasant, has now become such a source of obsessions and anxieties. As if we already had not enough of them. They make us suffer on the work place, at home, in the museum, so where can we spend a good time? I always say this: in the disco. I always repeat this to my students: as long as there will be discos there will be some hope.”

Indeed, maybe CUE is more related to disco than to art. CUE was born out of a lack, the need of a space accomplishing a therapeutic function, some sort of cathartic experience through participation rather than contemplation. The catharsis of doing and not the one of empathy. For this reason our commitment is not to restrict CUE to any type of artistic actions: in CUE every modality of creative expression is warmly welcomed.

Thus for CUE art is no more than an excuse, and whoever pretends to make some art critic out of what happens in CUE, has indeed understood nothing of it. CUE does not pretend to judge or value the artistic quality of the participants’ actions, but to provide an experience that is recreational, reinvigorating, disinhibitory/disinhibiting, just as Angel Maria Gonzalez said: “a place where to spend a good time”, without any further aim than “to make life more pleasant”. CUE is more a disco than a museum or an art gallery.

[Diegonante]

Decoracion Do we really know what CUE is?

CUE is active since more than one year now, having carried out 13 editions, but I think it’s still very very difficult to find the proper words or concepts to define it. All the texts we have written for the web of for presenting CUE to the institutions are nonetheless the result of a bureaucratic need, and to be sincere, since the moment those texts have been there, their presence and visibility has just been irritating me. We have not done yet CUE Madrid, but we are already trying to explain to the people of Madrid what CUE is. With the following words, my aim is to make the point about which, in my opinion, are the contradictions implied by CUE, contradictions that need to be made clear, overall with regard to the people who organise this event.

CUE deals with a point of departure, that we could define as the basic rules of the game. For sure, these points of departure have no other purpose than allowing a context of action, a table game where who wants to participate to CUE has the possibility of deciding on his or her own what is CUE. Thus, what we call the concept of CUE is indeed nothing more than an excuse in order to make everything possible to happen, as opening a hole in the darkness to allow light to enter, but how much light and which kind of light will not be decided by CUE, because what CUE cares about is just to keep that hole as much open as possible.

One of the basic points of CUE is the one of interaction. We announce CUE as a place of meeting where the participants have to face each other in order to keep open a communication channel. During the last CUE Berlin (4th April 2008) I realized a very important thing, just in the moment of going to the bathroom. Although I was inside it, I could still feel the sounds that were generating into the main room, even if I didn’t know exactly if that sort of interaction and communication was really taking place, nor I knew if the participants really cared about it at all, for sure in some unexplainable way I understood better than ever what CUE is. Words don’t help me to express what I got to realize when I went out of the bathroom and I found myself again with all that people “making things together”, without any apparent order nor regulated interaction, just a chaotic structure of small, multiple actions.

Maybe what I realized is that interaction and communication are not about looking to each other and trying to find a common point of balance where everything can sound as better as possible: indeed, maybe it’s just the opposite. The interaction and communication produced during CUE is in fact about chaos, disorder and simultaneity, that CUE itself ends up putting together in some kind of relationship. There will always be this kind of unity which is CUE itself, no matter what is happening, or if the participants are indeed trying to communicate or not, CUE always ends up putting all the small pieces together into itself. CUE is as much order and free communication, scrupulous interaction and chaos and disorder, anarchist party, explosion of individualities, ability of disregarding the others and tolerating chaos.

On the 9th of May CUE Madrid will start: thus, one month before that start, I would like to draw some further attention on the issues I’ve been telling until now. We still don’t know what is CUE and even less we know what it will be in Madrid, where it has not taken place yet, and where it will for sure be different from what it has been in Berlin.



[Diegonante]

Decoracion Therapeutic enjoyment

CUE is the project of a space open to spontaneous expression and interdisciplinary improvisation. It was born out of a lack: the need for places where to experiment new ways of expressing oneself, within a performative context where the actions have not necessarily to deal exclusively with artistic practises, but where instead all sorts of expression can be more than welcomed.

Why do we behave as we behave? CUE invites its participants/users to set aside all codes of behaviour that use to censor, educate and repress, while trying to take out or produce a much more spontaneous and hazardous behaviour. The aim of CUE is not to communicate a result to a public, nor to create a product, but to make available the necessary tools for the participants to enjoy their time. To enjoy while doing. CUE invites its participants to get disinhibited from whatever restrains the potentiality of our gestures.

SPIELPLATZ, ANARCHIC PARTY

Participation in a collective game where what is sought is an immediate communication, that is new and always unstable.

Enjoyment, disinhibition, loss of one’s fears, creation of an environment that allows people to feel comfortable (without any pressure of judgement). Autonomy.

To liberate expression from its being in a merchandise condition, that is about show business and consumption.

A problem: people who arrive with the expectation of “attending a show”.



[Diegonante]

Decoracion The problem of interferences

The society of CUE: related to the last chapter (named “to compose”) of J .Attali’s book “Noises”.

CUE is an open project, in constant search of its own meaning. Being aware of its utopian aspiration and the conditions where it actually takes place, it’s still to be understood if this project could somehow be considered as a proposal for another possible social organisation, where to shape new relationships with oneself and the others. In which kind of society would we like to live? How to make community through the principle of cultural autonomy?

To conceive CUE as the project of an ideal society based on the values of autonomy and tolerance: acceptance of the others and ability of set them aside (that are the only rules or principles of CUE). To make community: new relationships with oneself and the others.

Enjoyment, disinhibition, loss of one’s fears, creation of an environment that allows people to feel comfortable (without any pressure of judgement). Autonomy.

CULTURAL AUTONOMY. Subversion, To create differences.

PROBLEM: How can cohabitation be possible in a society where there are no given rules nor a director, and the individuals guide themselves only through the principle of individual enjoyment? How to integrate what takes place in CUE? When two individual enjoyments shock between each other and interfere? To say it with Attali: the answer is autonomy and tolerance. For CUE the questions are: How to make participants’ actions not to crash into each other? How to stir up the communication when there are no rules for it?

¿ How to understand the interferences? Different actions take place at the same time. What happens if one or more participants do not agree with the decisions/actions taken by other participants?

There are two kinds of interferences: positive and negative (in both cases it’s CUE)

  • the positive ones are the result of a simultaneity of actions, that is the result of an intentional or unintentional communication, or just the fact that at the same time different actions take place without provoking any sort of problem on both sides: harmony of differences.
  • the negative ones: when at least one participant gets to feel uncomfortable with the actions made by someone else.

SOLUTION: communication, to find an agreement with the other participant. How? It depends on the autonomy of every participant, that is everyone is responsible of stimulating this sort of communication.

How to understand tolerance?

Practical examples: generally it happens to involve music, complaints because its volume is too high, or maybe just unpleasant.